Traducido por IA
El Índice del Dólar Estadounidense (DXY) se sitúa cerca de $99.60, extendiendo su descenso por segundo día, incluso tras un informe de Nóminas No Agrícolas (NFP) más sólido de lo esperado.
En abril, la economía estadounidense añadió 177,000 empleos —muy por encima de los 130,000 pronosticados—, mientras que la tasa de desempleo se mantuvo estable en 4.2%.
El salario medio por hora aumentó un 3.8% interanual, igualando el crecimiento de marzo. Normalmente, estos datos respaldarían al dólar al reforzar la confianza en el mercado laboral, pero fuerzas macroeconómicas más amplias están opacando las cifras de empleo.
El sentimiento de los inversores se ha visto afectado por el anuncio del presidente Trump de un arancel del 100% sobre las películas producidas en el extranjero. Esta medida ha reavivado los temores ante políticas comerciales proteccionistas en un contexto de demanda global desigual.
Aunque Trump confirmó que no reemplazará al presidente de la Fed, Jerome Powell, antes de mayo de 2026 —lo que aporta cierta claridad política—, los mercados se muestran cautelosos.
La secretaria del Tesoro, Janet Yellen, sumó inquietudes al advertir que los nuevos aranceles podrían frenar el crecimiento de EE.UU. Con el aumento de las expectativas de recortes en las tasas por parte de la Reserva Federal más adelante este año, el dólar sigue enfrentándose a crecientes vientos en contra.
El Índice del Dólar Estadounidense (DXY) se cotiza cerca de $99.81, oscilando en torno a una zona clave que ha funcionado como resistencia y soporte. El precio se sitúa justo por encima de la línea de tendencia alcista y la EMA de 50 periodos ($99.74), lo que indica que los compradores continúan defendiendo la tendencia alcista a corto plazo.
La EMA de 200 periodos se sitúa por encima a $100.11, limitando el impulso alcista. La resistencia inmediata se ubica en $100.27, seguida de $100.63. En el lado bajista, el soporte se encuentra en $99.40 y $98.90.
El DXY se mantiene en un rango, con un sesgo alcista cauteloso siempre que se mantenga por encima de $99.40. Un cierre por encima de $100.27 podría cambiar el sentimiento de manera más decisiva.
La libra esterlina se sitúa cerca de $1.3285, atrapada entre señales técnicas en conflicto. El precio se encuentra justo por debajo de la EMA de 50 periodos en $1.3311 y se mantiene ligeramente por encima de la EMA de 200 periodos en $1.3252, lo que sugiere indecisión.
El par sigue teniendo problemas en el pivote de $1.3300, una zona clave de disputa reforzada por una congestión de precios anterior. La resistencia inmediata se sitúa en $1.3311, con la siguiente barrera al alza en $1.3378.
En el lado bajista, observe el soporte cerca de $1.3249 y $1.3202. A menos que los alcistas superen de manera convincente los $1.3311, la vía de menor resistencia se inclinará hacia $1.3249 y $1.3202. El impulso se mantiene frágil.
El euro se consolida justo por encima de $1.1325 tras no lograr mantener un impulso para superar la zona de resistencia en $1.1345, que además se alinea con una tendencia descendente.
El precio se encuentra encajonado entre la EMA de 50 periodos en $1.1333 y la EMA de 200 periodos en $1.1289, lo que refleja indecisión a corto plazo. La resistencia inmediata se ubica en $1.1345, con el siguiente obstáculo en $1.1423. El soporte se mantiene en $1.1264, mientras que una base más profunda se sitúa en $1.1209.
Una ruptura por debajo de la EMA de 200 periodos inclinaría el impulso hacia la baja. Una rotura alcista por encima de $1.1345 podría desencadenar un aumento hacia $1.1423, pero el euro debe mantenerse sobre $1.1289 para evitar una renovada presión vendedora.
Arslan, orador en webinars y analista de derivados, tiene un MBA en Finanzas y un MPhil en Finanzas Conductuales. Guía en análisis financiero, trading y pronósticos de criptomonedas. Experto en psicología del trading y sentimiento del mercado.