El precio del contrato de futuro del barril de crudo West Texas ha escalado +32,6% desde sus niveles mínimos de principios de diciembre, debido a que la demanda de crudo ha sido más robusta de lo esperado.
Fatih Birol, director ejecutivo de la Agencia Internacional de Energía, declaró que la demanda de crudo ha mostrado más fortaleza de la esperada debido a que los efectos de la nueva variante Ómicron del Covid-19 sobre la economía han sido menos severos de lo que se temía.
Adicionalmente, “algunos productores como Nigeria, Libia y Ecuador han sufrido interrupciones importantes en su oferta”, afectando aún más el equilibrio del mercado.
En un reporte publicado ayer, los analistas de JP Morgan argumentan que la falta de inversión va a afectar la oferta de crudo, provocando que el precio del barril de petróleo promedie $125 este año y continúe al alza hasta alcanzar los $150 en el 2023.
Parte de esta falta de inversión se verá reflejada en la caída de la capacidad no utilizada de los países miembros de la OPEP, que pasaría desde 13% en el tercer trimestre de 2021 hasta 4% a finales de 2022.
De esta manera el banco considera que no existe capacidad para incrementar mucho más la producción en caso que la demanda continúe aumentando, situación que podría generar una crisis energética en el mediano plazo.
El precio del contrato de futuro del barril de crudo West Texas continúa mostrando fortaleza al mantenerse por encima de la media móvil de 10 días durante las últimas cuatro semanas.
Sin embargo, el indicador RSI está próximo a dar señales de sobrecompra en sus observaciones diarias, mientras que en las observaciones de 4 horas ya se muestra sobrecomprado y listo para, por lo menos, experimentar una ligera corrección en el precio.
Para corregir esta situación, el precio podría simplemente formar un canal horizontal hasta que la media móvil de 10 días lo alcance, para luego seguir subiendo en búsqueda de los niveles máximos del año pasado alrededor de $85.
Sócrates se graduó en la universidad y enseguida comenzó a trabajar cubriendo el mercado de acciones de Estados Unidos, México, Brasil, Argentina y Venezuela. A medida que avanzó en su carrera profesional administró fondos mutuales, fondos de retiro y carteras institucionales. Además, fue trader de bonos de deuda de mercados emergentes para carteras propietarias. Sócrates fue CFA charterholder durante 14 años, pero actualmente no es miembro activo del CFA Institute. También es Financial Risk Manager, certificado por Global Association of Risk Professionals.