Según el estimado promedio de los analistas, el índice de precios del gasto en consumo personal, indicador de inflación más utilizado por los miembros de la Reserva Federal, habría aumentado +6,5% en febrero, superando la inflación de +6,1% registrada en enero y justificando aún más la posición de las autoridades monetarias de ser más agresivas en su lucha contra la inflación.
Adicionalmente, la publicación del índice de actividad manufacturera calculado por el Institute of Supply Management, incluiría un incremento del subíndice de precios del 75,6 en febrero hasta 79,4 en marzo.
Esta semana, las autoridades monetarias de Estados Unidos realizaron un esfuerzo por dejar claro que están dispuestas a incrementar la tasa de interés referencial en +0,50% en una o más reuniones, si las condiciones económicas lo ameritan.
Las cifras de inflación que sean publicadas antes de la reunión del 3 y 4 de mayo serán la clave para que la Reserva Federal anuncie un incremento de +0,25% o de +0,50%.
Al cierre de hoy, la probabilidad de un incremento de +0,25% se ubica en 29,5%, mientras que uno de +0,50% se ejecutaría con una probabilidad de 70,5%. Estas cifras según cálculos de los instrumentos derivados de las tasas de interés.
Los analistas estiman que la actividad manufacturera en Texas se incrementó en el mes de marzo, con el índice publicado por el Banco de Dallas de la Reserva Federal ubicándose en 17, por encima del 14 alcanzado en febrero, representando su mejor nivel desde julio del año pasado.
En medio de la aceleración de la inflación y la guerra entre Rusia y Ucrania, el reporte de empleo que será publicado la próxima semana pudiera tener menos relevancia de lo normal.
En febrero, las nóminas no agrícolas crecieron en 678.000 trabajadores, su mejor desempeño desde julio del año pasado, mostrando una fuerte recuperación desde el incremento de 481.000 experimentado en enero y elevando el promedio de los últimos 6 meses hasta 582.000 trabajadores.
En meses recientes, cifras alrededor de 500.000 trabajadores han sido consideradas suficientes para demostrar la solidez del mercado laboral y, para marzo, los analistas estiman un incremento de 475.000 trabajadores.
Dado el enfoque de las autoridades monetarias en su lucha contra la inflación, tendría que darse una sorpresa negativa mayúscula en el reporte de empleo para que los miembros de la Reserva Federal cambien su intención de discutir un incremento de +0,50% en la tasa de interés referencial en la próxima reunión de mayo.
El índice de precios a nivel de los consumidores habría registrado un incremento de +6,5% en marzo, según el estimado promedio de los analistas, un nuevo récord en materia inflacionaria en el Viejo Continente, a pesar que los efectos de la guerra sobre los precios todavía no se han terminado de apreciar.
Excluyendo los volátiles rubros de alimentos y energía, la inflación se habría ubicado en +3,1%.
El comienzo de la guerra entre Rusia y Ucrania, junto con el incremento ocasionado sobre los precios de las materias primas y las interrupciones en las cadenas de distribución, habrían impulsado la confianza de los consumidores de la Zona Euro hasta sus peores niveles desde el inicio de la pandemia.
El índice Caixin de actividad manufacturera habría caído hasta 49,1 en marzo, desde el 50,5 registrado en febrero, igualando su peor registro de los últimos dos años alcanzado hace 2 meses.
Efecto sobre el dólar
El dólar continuaría siendo la divisa más favorecida por las expectativas de mediano plazo vigentes en el mercado.
Por un lado, los efectos negativos de la guerra en materia económica deberían ser más pronunciados en la Zona Euro e Inglaterra, en comparación con los Estados Unidos.
Por el otro, la Reserva Federal está dando señales de querer ser más agresiva en el incremento de la tasa de interés referencial, con respecto a sus similares de Inglaterra y Europa.
Estas condiciones deberían continuar impulsando al alza a la divisa norteamericana.
No debería extrañar que el Euro visite nuevamente sus mínimos del año para ubicarse cerca de $1,08 en los próximos días.
Sócrates se graduó en la universidad y enseguida comenzó a trabajar cubriendo el mercado de acciones de Estados Unidos, México, Brasil, Argentina y Venezuela. A medida que avanzó en su carrera profesional administró fondos mutuales, fondos de retiro y carteras institucionales. Además, fue trader de bonos de deuda de mercados emergentes para carteras propietarias. Sócrates fue CFA charterholder durante 14 años, pero actualmente no es miembro activo del CFA Institute. También es Financial Risk Manager, certificado por Global Association of Risk Professionals.