Durante las últimas dos semanas, el precio del oro ha presentado dificultades para establecer una tendencia clara, debido a la incertidumbre acerca de la posibilidad de que Rusia y Ucrania lleguen a un acuerdo para acabar con la guerra.
En la medida en que la probabilidad de un acuerdo aumenta, los precios de las materias primas han retrocedido, disminuyendo los temores por la aceleración sostenida de la inflación y el efecto negativo que tendría esta situación sobre el crecimiento económico.
En este escenario, la necesidad de los inversionistas de buscar refugio en el oro disminuye, junto con su precio.
Sin embargo, también existe la posibilidad de que el conflicto se alargue y los costos de las empresas continúen en aumento, generando inflación sostenida en los precios que cancelan los consumidores finales. Esto pudiera provocar una disminución de la demanda que derive en una desaceleración del crecimiento económico.
En este caso, la demanda de oro como activo de protección del capital ante una posible recesión impulsaría su precio al alza.
Con la información disponible en estos momentos, parece poco oportuno tomar una decisión de compra o venta de este activo. Es preferible esperar que el precio marque una tendencia que luzca más sostenible.
A partir de esta semana, el banco central ruso estableció un precio fijo de 5.000 rublos ($52) por gramo para la compra de oro a los bancos locales, luego de haberla suspendido por dos semanas.
Este precio representa un descuento aproximado de 16% con respecto al precio de mercado.
La cotización del oro cerró ayer en $1932 por onza troy. Una onza troy equivale a 31.1 gramos, por lo que el banco central ruso estaría comprando el oro a un precio aproximado de $1.617.
En la jornada de ayer, el precio del contrato de futuro del oro intentó cerrar por encima de la media móvil de 10 días y, aunque no lo logró, cerró con fuerza cerca de los niveles máximos del día.
Sin embargo, esta mañana, el precio retrocede ligeramente, a la espera de señales más claras que le permitan a los inversionistas definir la dirección que tomará el precio en el corto plazo.
De mantenerse por encima del soporte que representa el nivel 1920, el precio podría intentar romper nuevamente al alza la media móvil de 10 días y retomar su tendencia alcista.
Por el contrario, una ruptura de este soporte podría llevar al precio directamente hasta la media móvil de 50 días y esta pudiera no volver a funcionar como soporte, permitiendo la caída del precio hasta el siguiente nivel que se ubica alrededor de 1872.
El indicador RSI continúa sin dar señales de fortaleza al intentar romper a la baja la barrera de 50.
Sócrates se graduó en la universidad y enseguida comenzó a trabajar cubriendo el mercado de acciones de Estados Unidos, México, Brasil, Argentina y Venezuela. A medida que avanzó en su carrera profesional administró fondos mutuales, fondos de retiro y carteras institucionales. Además, fue trader de bonos de deuda de mercados emergentes para carteras propietarias. Sócrates fue CFA charterholder durante 14 años, pero actualmente no es miembro activo del CFA Institute. También es Financial Risk Manager, certificado por Global Association of Risk Professionals.