Traducido por IA
Los precios del petróleo y el gas natural se estabilizaron a mitad de semana, con el crudo WTI subiendo por encima de los 62 dólares por barril tras una disminución de 2,4 millones de barriles en las reservas estadounidenses, casi el doble de lo esperado. Esta reducción señala una demanda resiliente, aunque las ganancias siguen siendo limitadas debido a las tensiones geopolíticas que nublan las perspectivas.
Los traders de energía evalúan la posibilidad de cambios en los flujos globales de suministro, incluyendo un fortalecimiento de las exportaciones rusas y un mayor rendimiento de la OPEP+, lo que ha presionado al crudo hasta alcanzar un mínimo de tres meses, cayendo más de un 10% este mes.
Ante la incertidumbre en torno a las negociaciones globales y la aplicación de sanciones, los mercados de petróleo y gas se enfrentan a un frágil equilibrio entre los riesgos de suministro y una demanda resiliente.
Los futuros del gas natural se cotizan a 2,75 dólares, manteniéndose cerca del soporte a corto plazo en 2,73 dólares después de no lograr sostener el impulso por encima de 2,88 dólares. La tendencia más amplia sigue presionada por una línea de tendencia descendente, limitando el alza por debajo de la media móvil exponencial de 50 (2,83 dólares) y la de 100 (2,88 dólares).
Si el precio cae, los siguientes objetivos a la baja se sitúan en 2,67 y 2,61 dólares. Por otro lado, un rebote por encima de 2,80–2,83 dólares podría abrir el camino a una nueva prueba de 2,95 dólares.
El RSI en 36,3 indica un impulso débil, lo que apunta a una presión vendedora continua, a menos que los compradores intervengan en torno al soporte actual. Hasta que se produzca una rotura alcista clara por encima de la línea de tendencia descendente, el mercado seguirá siendo vulnerable a una mayor extensión a la baja.
El petróleo crudo WTI se cotiza a 62,47 dólares, mostrando primeros signos de estabilización tras probar la zona de soporte de 61,55 dólares. La acción de precio sigue limitada por una línea de tendencia descendente, alineándose estrechamente con la media móvil exponencial de 50 (62,57 dólares) y la de 100 (63,24 dólares), reforzando la resistencia superior.
Un cierre decisivo por encima de estos niveles podría abrir el camino hacia 64,14 y 65,12 dólares, mientras que no superarlos podría prolongar la tendencia bajista. Por el lado negativo, una ruptura por debajo de 61,55 dólares expone a 60,72 y, potencialmente, a 59,91 dólares.
Los indicadores de impulso muestran un sentimiento en mejora, con el RSI recuperándose a 54, lo que sugiere que los compradores están intentando retomar el control. Por ahora, la estructura favorece una vigilancia cautelosa a la espera de una rotura alcista confirmada, en lugar de un posicionamiento prematuro.
El crudo Brent se cotiza a 66,44 dólares, intentando superar una línea de tendencia descendente que ha limitado el impulso alcista desde principios de agosto. El precio se está consolidando dentro de un triángulo simétrico, con una resistencia inmediata en 66,58 dólares (media móvil exponencial de 100) y un techo más fuerte en 67,15 dólares.
Una rotura alcista confirmada por encima de estos niveles podría abrir el camino hacia 68,15 y 69,14 dólares. Por el lado negativo, el soporte se sitúa en 65,30 dólares, seguido de 64,61 en caso de que aumente la presión. El impulso está mejorando, con un RSI en 58,4, lo que sugiere un creciente interés alcista tras una consolidación prolongada.
Hasta que el precio supere el límite superior del triángulo con volumen, el mercado se mantiene en rango, favoreciendo estrategias de trading reactivas en torno a las zonas de soporte y resistencia.
Arslan, orador en webinars y analista de derivados, tiene un MBA en Finanzas y un MPhil en Finanzas Conductuales. Guía en análisis financiero, trading y pronósticos de criptomonedas. Experto en psicología del trading y sentimiento del mercado.