Poco se habla de los impactos que tienen estos eventos naturales en los mercados financieros, en especial los que afectan a la primera economía, generando en principio una contracción del crecimiento, pero que en general en el mediano plazo crean una recuperación que supera en muchas de las veces a las condiciones normales del mercado, lo que termina favoreciendo principalmente a todos los mercados, guiados por el mismo sentimiento optimista.
Hagamos una revisión de los últimos eventos naturales de relevancia para poder estimar un impacto económico en los mercados financieros.
Franklin, se forma el 6 de agosto en el mar del caribe, frente a la costa hondureña, no tiene ninguna afectación en la economía americana, al mantenerse apenas en el caribe y centro mexicano.
Harvey, se forma en el caribe como tormenta tropical y pasa a ser un huracán de categoría 1 el 24 de agosto en la costa de Texas, zona que concentra un 20% de la producción total de crudo en EE.UU. generando una menor producción de crudo, ayudando en parte a un alza del precio desde los $ 46.43 a un máximo en $ 49.35, un huracán que se estima tuvo un impacto económico de $ 160 billones de dólares.
Irma,se desarrolló el 30 de agosto cerca de las islas de Cabo Verde y azoto este pasado 10 de septiembre Florida con un impacto económico que se estima en $ 64 billones.
Katia,seformó en el suroeste del Golfo de México y puso bajo alerta a Veracruz, México el pasado 9 de septiembre, perdiendo fuerza este 12 de septiembre.
Jose, se encuentra en aguas del océano Atlántico y se convierte en huracán el 6 de septiembre y aunque ya ha bajado de categoría, aun es un riesgo para los Estados Unidos.
Resumimos que 2 de los recientes huracanes que afectaron a los EE.UU. (Harvey e Irma) aproximadamente tendrían un impacto de 224 billones de dólares, por encima del daño económico que causo Katrina en el 2005 con una estimación en los $ 200 billones, en aquel entonces cuando la tasa de crecimiento estimada fue reducida en un medio punto después de Katrina, debido a los daños económicos que se produjeron, escenario que se espera tenga el mismo efecto en esta oportunidad, apoyando aún más a una FED cautelosa en las próximas revisiones de su política monetaria.