Traducido por IA
El índice del dólar estadounidense cotiza a la baja en la sesión intermedia del lunes, y la presión se mantiene a pesar de que el ritmo es lento. Los vendedores no están forzando la situación, pero los compradores tampoco se hacen presentes. El dólar se desploma sin rebotar, mientras los traders se posicionan con cautela antes de una intensa semana de datos en EE. UU.
El precio se sitúa ahora alrededor de un retroceso clave del 50% en 98,307, un nivel que empieza a parecer una línea divisoria a corto plazo. La tendencia general ya es bajista, por lo que esta área es relevante. Si se mantiene, el mercado podría consolidar; si se rompe, el impulso a la baja podría incrementarse rápidamente.
A las 17:56 GMT, el DXY cotiza a 98,343, bajando 0,050 o -0,05%.
Los rendimientos del Tesoro descienden a lo largo de la curva, lo que mantiene al dólar bajo una presión constante. El rendimiento de los bonos a 10 años cae más de tres puntos básicos, situándose cerca del 4,16%, mientras que los de 2 y 30 años también retroceden. Los traders están reduciendo su exposición en lugar de apostar por un rebote.
La disminución de los rendimientos es importante porque reduce la rentabilidad relativa de los activos estadounidenses. Cuando esos retornos caen, el dólar pierde uno de sus soportes clave. Con los inversores anticipando una serie de publicaciones económicas rezagadas, hay poca urgencia por reconstruir posiciones largas en dólares.
Esta semana se publicarán las nóminas de noviembre y la tasa de desempleo, seguidas de las ventas minoristas y del informe del IPC del jueves. Los datos son importantes, pero los traders saben que gran parte de ellos resulta retrospectiva y está distorsionada por el cierre del gobierno. Esa incertidumbre mantiene la convicción baja y los flujos en modo defensivo.
La Reserva Federal no está proporcionando mucho impulso. El recorte de tasas de la semana pasada vino acompañado de un mensaje claro del presidente Powell: los responsables de la política no tienen prisa por recortar nuevamente mientras esperan señales más claras en los datos. Esa postura limita el alza de los rendimientos y, por extensión, del dólar.
Las conversaciones políticas sobre posibles cambios en el liderazgo de la Fed añaden ruido, pero no están impulsando el precio. Lo importante es que el mercado percibe paciencia, no urgencia, por parte de la Fed. Esto deja al dólar expuesto si los datos entrantes resultan decepcionantes.
Técnicamente, el panorama sigue siendo débil. El DXY cotiza por debajo de la media móvil de 200 días, ubicada en 99,318, y de la media móvil de 50 días, en 99,242, y ambas actúan como resistencia. Los repuntes en esa zona probablemente atraerán a los vendedores.
La media móvil de 200 días también está en posición de cruzar al lado bajista de la de 50 días, una configuración que reforzaría la tendencia bajista y podría incitar a nuevos vendedores motivados por el impulso.
En lo negativo, una ruptura por debajo de 98,307 enfoca la atención en el retroceso del 61,8% en 97,814, situándose 96,218 por debajo de ese nivel.
El dólar no se está colapsando, al menos aún. Pero el riesgo se inclina hacia la baja. Con los rendimientos en descenso y la Fed sin cambios, al DXY no le hace falta una buena noticia para caer. Un informe de empleo débil o unos datos de IPC más bajos podrían ser el disparador que convierta esta operación moderada en una caída más pronunciada. Si 98,307 se derrumba ante datos bajistas, es probable que los vendedores presionen, y el descenso podría producirse rápidamente.
Más información en nuestro Calendario Económico.
James A. Hyerczyk ha trabajado como analista fundamental y técnico de los mercados financieros desde 1982. James comenzó su carrera en Chicago como analista de mercado de futuros para CBOT y CME y ha estado ofreciendo análisis de calidad para traders profesionales durante 36 años. Su trabajo técnico utiliza las técnicas de análisis de patrón, precio y tiempo de W.D. Gann. James tiene un Máster en Administración de Empresas de la St. Xavier University y un Máster en Mercados Financieros y Negociación del Instituto de Tecnología de Illinois.