Traducido por IA
El índice del dólar estadounidense (DXY), que mide el valor del dólar frente a seis divisas principales, se mantuvo cerca de $97.95 en la jornada asiática del lunes. Aunque el índice muestra resiliencia, las ganancias siguen siendo limitadas, ya que los inversores ponderan el riesgo de un posible cierre parcial del gobierno de EE. UU. y las crecientes expectativas de recortes de tasas por parte de la Reserva Federal a finales de este año.
Los acontecimientos políticos en Washington mantienen a los traders cautelosos. Con la financiación para las operaciones federales a punto de expirar el miércoles, primer día del año fiscal 2026, los mercados se preparan para la posibilidad de un cierre parcial. Los legisladores siguen divididos y la falta de acuerdo podría interrumpir funciones gubernamentales clave y afectar la confianza de los inversores en el dólar.
La Oficina de Presupuesto del Congreso había estimado anteriormente que el cierre de 2018–2019 redujo el PIB en $11 mil millones, lo que subraya las posibles consecuencias económicas de un estancamiento prolongado.
En el ámbito económico, el índice de precios de los Gastos de Consumo Personal (PCE), la medida de inflación preferida por la Fed, destacó la persistencia de la presión sobre los precios. El PCE general aumentó un 2.7% interanual en agosto, frente al 2.6% de julio, mientras que el núcleo del PCE, que excluye alimentos y energía, se mantuvo sin cambios en 2.9% interanual.
En términos mensuales, el PCE general subió un 0.3% y el núcleo del PCE aumentó un 0.2%. Los datos indican una inflación que se mantiene por encima del objetivo, lo que complica la difícil tarea de la Fed de equilibrar el apoyo al crecimiento y el control de los precios.
A pesar de una inflación elevada, los traders continúan apostando por un aflojamiento monetario. Según la herramienta CME FedWatch Tool, los mercados asignan una probabilidad del 90% de un recorte de tasas en octubre y casi un 65% de probabilidades de otro recorte en diciembre.
Esta perspectiva dovish ha limitado el impulso alcista del dólar, ya que los inversores anticipan ajustes en la política destinados a amortiguar los riesgos económicos.
La atención se centra ahora en los comentarios de los funcionarios de la Reserva Federal, incluidos el gobernador Christopher Waller, la presidenta de la Fed de Cleveland, Beth Hammack, y el presidente de la Fed de Nueva York, John Williams.
Sus declaraciones para el lunes por la tarde podrían proporcionar señales críticas sobre cómo ve el banco central los riesgos de inflación, las perspectivas de crecimiento y el posible calendario de los recortes de tasas.
Un tono más agresivo podría brindar un apoyo temporal al dólar, aunque las mayores incertidumbres fiscales y de política siguen afectando la perspectiva.
El índice del dólar estadounidense (DXY) se mantiene cerca de $97.95, poniendo a prueba el soporte en el límite inferior de su canal ascendente. El índice retrocedió recientemente desde $98.56, donde los vendedores intervinieron, pero se mantiene por encima tanto de la EMA de 50 ($97.94) como de la EMA de 200 ($97.71), lo que preserva la estructura a corto plazo.
El RSI en 55 indica que el impulso se ha enfriado respecto a los niveles de sobrecompra, lo que sugiere un período de consolidación en lugar de una presión bajista inmediata. Un rebote desde los niveles actuales podría llevar a que el precio repita la zona de $98.30–$98.50, mientras que un cierre por debajo de $97.90 conlleva el riesgo de sufrir más pérdidas hasta $97.20.
El par GBP/USD se cotiza alrededor de $1.3438, recuperándose tras una fuerte caída a inicios de semana. El precio ha superado una línea de tendencia descendente, lo que sugiere un cambio en el impulso a corto plazo. La resistencia inmediata se sitúa cerca de $1.3467, donde convergen la EMA de 50 ($1.3431) y la EMA de 200 ($1.3493), formando una barrera clave.
Si los compradores mantienen el impulso, el próximo objetivo alcista se sitúa alrededor de $1.3527–$1.3590. Por el lado bajista, se observa soporte cerca de $1.3386 y luego en $1.3340. El RSI en 60 sugiere una fortaleza en mejoría, pero aún sin llegar a niveles extremos, lo que deja espacio para un mayor ascenso si se supera la resistencia.
El par EUR/USD se cotiza cerca de $1.1723, intentando recuperarse tras una caída pronunciada la semana pasada. El precio está probando una línea de tendencia descendente que ha limitado el impulso alcista desde mediados de septiembre. La EMA de 50 ($1.1725) y la EMA de 200 ($1.1737) están convergiendo, creando una zona de resistencia a corto plazo. Si los compradores logran mantenerse por encima de este conjunto, el par podría avanzar hacia $1.1790–$1.1810.
Sin embargo, un rechazo en este nivel probablemente empujaría al EUR/USD de vuelta hacia $1.1660 e incluso a $1.1615. El RSI en 56 sugiere un impulso en mejoría, pero aún lejos de alcanzar niveles de sobrecompra.
Arslan, orador en webinars y analista de derivados, tiene un MBA en Finanzas y un MPhil en Finanzas Conductuales. Guía en análisis financiero, trading y pronósticos de criptomonedas. Experto en psicología del trading y sentimiento del mercado.