El Congreso de los Diputados de España avala la reforma de las pensiones

MADRID, 30 mar (Reuters) – El Congreso de los Diputados de España respaldó el jueves los cambios propuestos por el Gobierno en el sistema de pensiones del país, que aumentan las cotizaciones de casi 11 millones de pensionistas y hacen recaer la mayor parte del coste adicional sobre las rentas más altas del país y sus empleadores.

A diferencia de Francia, donde las protestas intersectoriales se han sucedido durante semanas por la propuesta del Elíseo de ampliar dos años la edad de jubilación, hasta los 64 años, y recortar algunas prestaciones, el plan español se centra en aumentar los ingresos mediante subidas de impuestos.

El ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, dijo que la reforma se dirige a la mayoría social del país, describiendo las pensiones como “el pilar más importante del Estado del bienestar”, al tiempo que instó a los disputados a aprobarla.

El proyecto de ley fue aprobado en la cámara baja del Parlamento español por 179 votos a favor, 104 en contra y 61 abstenciones.

La reforma, un requisito clave de Bruselas para que España obtenga un nuevo tramo de los fondos europeos para la recuperación tras la pandemia del COVID-19, había provocado un debate de cuatro meses en el seno del Gobierno español, que buscaba la forma de aumentar los ingresos sin penalizar a los futuros pensionistas.

Se espera que los ingresos aumenten en 15.000 millones de euros (16.000 millones de dólares) al año, lo que representaría un incremento de tres puntos porcentuales del producto interior bruto de aquí a 2050 y reduciría al 15,5% del PIB la carga del pago de las pensiones sobre el presupuesto.

La reforma cuenta con la oposición de los diputados conservadores y de la patronal española CEOE, que argumentan que aumentará los costes laborales, pondrá en peligro la creación de empleo y reducirá los salarios de los trabajadores.

Pero el Gobierno de coalición de izquierdas ha afirmado que los cambios, respaldados por los sindicatos, aportarán estabilidad a un sistema de pensiones sometido a presión con una de las poblaciones más envejecidas de Europa.

España llevó a cabo una importante reforma de las pensiones en 2011, cuando elevó la edad de jubilación a los 67 años, pero resultó insuficiente para compensar los elevados costes del sistema, que se ha visto presionado por medidas como el aumento de las pagas de jubilación en función de la inflación.

(1 dólar = 0,9383 euros)

(Reporte de David Latona; escrito por Andrei Khalip; edición de William Maclean; editado en español por Darío Fernández)