Las actas del FOMC de octubre llegaron con un golpe — no porque la Fed sorprendiera a alguien, sino porque la división interna del Comité es más marcada de lo que los mercados esperaban. Se recortaron las tasas en 25 puntos básicos, se puso fin a la reducción gradual del balance a partir del 1 de diciembre, y aún no se pudo llegar a un consenso sobre la severidad real de la política. Los traders concluyeron con una idea: diciembre está completamente abierto, y la Fed no parece tener la suficiente confianza como para contradecir esa posibilidad.
El repunte de la inflación a 2,8 % interanual ha dividido al Comité. Algunos interpretan este aumento como mayormente el efecto de los aranceles — molesto pero transitorio. Otros están inquietos tras cuatro años por encima del objetivo, y las actas dejan claro que la preocupación no desaparecerá pronto. La dinámica aquí es crucial: si el choque arancelario se desvanece rápidamente, las palomas tendrán argumentos a su favor. Pero si no, las águilas argumentarán que la Fed ya recortó demasiado pronto.
El panorama laboral es confuso. El crecimiento se ha desacelerado, los despidos no aumentan significativamente y las contrataciones están flojas — una mezcla incómoda para un banco central que busca señales más claras. Algunos participantes señalaron la posibilidad de que la IA y la automatización estén distorsionando las relaciones tradicionales entre la producción y el empleo. Los traders no necesitan un debate académico completo aquí; la conclusión es más sencilla: el mercado laboral no está colapsando, pero se está enfriando lo suficiente como para que el campamento de las palomas pueda exponer sus argumentos.
Básicamente sí. Las actas describen abiertamente “puntos de vista profundamente divergentes,” lo cual es una rareza en la Fed. La mitad del comité se inclina por otro recorte, citando un panorama laboral más débil y el deseo de acercarse a la neutralidad. La otra mitad prefiere esperar — la inflación sigue siendo persistente, el crecimiento se mantiene y nadie quiere que las expectativas se desvíen. Los mercados, que están operando como si se tratara de una decisión al azar para un recorte en diciembre, perciben direccionalmente esta posibilidad. El IPC y los datos de nómina de noviembre decidirán el movimiento — suponiendo que el calendario de datos retome su curso tras el cierre.
Las acciones reciben un leve impulso gracias al fin de la reducción gradual y a la inclinación general hacia la flexibilización de la Fed. Pero las actas también resaltan las valoraciones tecnológicas estiradas y el riesgo de una corrección desordenada si el optimismo vinculado a la IA se desborda. Con el liderazgo concentrado en unos pocos grandes nombres, el mercado se apoya en hombros estrechos. Los compradores siguen apareciendo ante la debilidad, pero el alza parece limitada a menos que los datos rompan decisivamente el argumento de las águilas.
Detener la reducción del balance a partir del 1 de diciembre es un gran acontecimiento — alivia la presión de los mercados monetarios tensos y reduce la oferta esperada del Tesoro. Esto debería ayudar a anclar los rendimientos, especialmente a lo largo de la curva. Sin embargo, las persistentes preocupaciones por la inflación mantienen un piso en los rendimientos a largo plazo. Los traders podrían ver un leve empinamiento hacia fin de año, siendo el movimiento mayor dependiente de la decisión de diciembre.
En resumen: la Fed está dividida, los datos son confusos y la próxima reunión realmente importa. El fin de la reducción gradual elimina un obstáculo para los activos de riesgo, pero la clara preocupación del Comité por las valoraciones y la estabilidad financiera sugiere un poco más de cautela en la posición. Los traders deberían concentrarse en los números de noviembre — estos marcarán el tono para el movimiento final del año.
James A. Hyerczyk ha trabajado como analista fundamental y técnico de los mercados financieros desde 1982. James comenzó su carrera en Chicago como analista de mercado de futuros para CBOT y CME y ha estado ofreciendo análisis de calidad para traders profesionales durante 36 años. Su trabajo técnico utiliza las técnicas de análisis de patrón, precio y tiempo de W.D. Gann. James tiene un Máster en Administración de Empresas de la St. Xavier University y un Máster en Mercados Financieros y Negociación del Instituto de Tecnología de Illinois.