Traducido por IA
Durante las primeras horas de la sesión europea, el índice del dólar estadounidense (DXY) se mantuvo cerca de 99.58, ya que los traders evitaron grandes posicionamientos antes de las actas del FOMC del miércoles. A continuación, el foco se desplazará hacia el informe NFP (nóminas no agrícolas) de EE. UU, retrasado para el jueves, que sigue teniendo un peso significativo en el sentimiento sobre el dólar a pesar de reflejar condiciones pasadas del mercado laboral.
Los comentarios recientes de los responsables de la política de la Reserva Federal han contribuido a sostener al dólar. El vicepresidente de la Fed, Philip Jefferson, indicó que el banco central debería proceder “con cautela” ante cualquier nuevo recorte de tasas, mientras que el presidente de la Fed de Atlanta, Bostic, y el presidente de la Fed de Kansas City, Schmid, resaltaron los riesgos inflacionarios persistentes y mostraron poca urgencia por flexibilizar la política monetaria.
Estas declaraciones han limitado la presión bajista sobre el dólar en un momento en que la incertidumbre en el mercado se ha elevado.
El cierre parcial del gobierno de EE. UU ha pospuesto la publicación de indicadores económicos importantes, lo que complica la evaluación de las condiciones actuales por parte de la Fed. Los mercados esperan que el informe NFP de septiembre, ahora retrasado, muestre alrededor de 50.000 nuevos empleos, frente a los 22.000 de agosto, manteniendo la tasa de desempleo en un 4,3%.
Un resultado más débil podría reforzar las preocupaciones sobre la desaceleración del crecimiento, mientras que datos más sólidos respaldarían al dólar al reducir las expectativas de recortes de tasas inminentes.
El sentimiento entre los inversores se mantiene cauteloso, ya que la inflación se sitúa por encima del objetivo y la visibilidad de los datos continúa siendo limitada. Según la herramienta CME FedWatch, las expectativas de un recorte de tasas en diciembre han descendido al 46%.
Por ahora, es posible que el DXY continúe operando con un leve sesgo alcista mientras los mercados analizan las próximas actas del FOMC y el informe NFP para obtener una dirección más clara sobre las perspectivas económicas y la política futura de la Fed.
El índice del dólar estadounidense se mantiene cerca de 99.55, aunque sigue confinado dentro de un canal descendente que ha empujado los precios a la baja desde principios de noviembre. El índice tiene dificultades para mantener el impulso por encima de la resistencia en 99.66, donde la media móvil exponencial (EMA) de 20 períodos sigue limitando los avances intradiarios.
El RSI se sitúa alrededor de 55, lo que indica un interés alcista moderado pero sin señalar una rotura alcista clara.
Un rechazo en el límite superior del canal mantiene un sesgo ligeramente bajista. Un movimiento por debajo de 99.24 expondría el soporte medio del canal, cercano a 98.99. Si los compradores logran un cierre sostenido por encima de 99.66, el dólar podría desafiar la marca de 100.30.
El GBP/USD se cotiza cerca de 1.3150 y sigue respetando la línea de tendencia descendente que ha limitado cada repunte este mes. El par se encuentra por debajo tanto de la EMA de 50 períodos como de la EMA de 200 períodos en el gráfico de 4 horas, lo que mantiene el impulso a la baja.
Las velas recientes muestran una consolidación ajustada, reflejando la incertidumbre ante factores determinantes. El RSI se sitúa en la zona media con un leve sesgo bajista, indicando una demanda débil sin signos claros de agotamiento. Una rotura por debajo de 1.3108 expondría el soporte en 1.3009, seguido por 1.2970.
Si los compradores logran empujar el par por encima de la línea de tendencia descendente y se mantienen por encima de 1.3215, podría iniciarse una recuperación; sin embargo, la estructura actual sigue favoreciendo a los vendedores. Por ahora, el GBP/USD se mantiene en una tendencia bajista controlada con señales alcistas limitadas.
El EUR/USD se mantiene por encima de la zona de soporte de 1.1573, donde el límite inferior del canal ascendente sigue atrayendo a los compradores. El par intenta estabilizarse tras varias sesiones de máximos en descenso, mientras que la EMA de 20 períodos actúa como una barrera a corto plazo para el impulso. El RSI se sitúa en la zona media, mostrando una presión neutral y primeros indicios de acumulación cerca del soporte de la tendencia.
Si el EUR/USD mantiene el canal intacto, será probable una recuperación hacia 1.1655, seguida de una posible extensión hasta 1.1695. Un movimiento claro por encima de la EMA de 200 períodos reforzaría el argumento alcista.
La imposibilidad de sostener el nivel de 1.1573 rompería la estructura del canal y expondría 1.1542 como el siguiente nivel a la baja. Por ahora, el par se mantiene constructivo siempre que la línea de tendencia ascendente se conserve.
Arslan, orador en webinars y analista de derivados, tiene un MBA en Finanzas y un MPhil en Finanzas Conductuales. Guía en análisis financiero, trading y pronósticos de criptomonedas. Experto en psicología del trading y sentimiento del mercado.